Las opciones de tratamiento del reflujo vesicoureteral dependen de la gravedad de la afección. Los niños con casos leves de reflujo vesicoureteral primario pueden, con el tiempo, superar el trastorno. En este caso, el médico puede recomendar un abordaje que consiste en esperar y ver los resultados.
En el caso de un reflujo vesicoureteral más grave, las opciones de tratamiento comprenden:
Medicamentos
Las infecciones urinarias requieren un tratamiento inmediato con antibióticos para evitar su propagación a los riñones. Para prevenir las infecciones urinarias, los médicos también pueden recetar antibióticos en una dosis menor que para tratarlas.
Es necesario controlar a los niños que se tratan con medicamentos mientras estén tomando antibióticos. Esto comprende exploraciones físicas periódicas y análisis de orina para detectar variantes (infecciones urinarias que se producen a pesar del tratamiento antibiótico) y exploraciones radiográficas ocasionales de la vejiga y los riñones para determinar si tu hijo ha superado el reflujo vesicouretral.
Cirugía
La cirugía para el reflujo vesicouretral repara el defecto de la válvula entre la vejiga y cada uréter afectado. Un defecto en la válvula impide que se cierre y que evite que la orina fluya hacia atrás.
Los métodos de reparación quirúrgica son:
- Cirugía abierta. Esta cirugía, que se realizada con anestesia general, requiere una incisión en la parte baja del abdomen a través de la cual el cirujano repara el problema. Usualmente, este tipo de cirugía requiere unos días de internación en el hospital, durante los cuales se deja colocada una sonda para drenar la vejiga del niño. El reflujo vesicouretral puede persistir en un grupo pequeño de niños, pero generalmente se resuelve por sí solo sin necesidad de otra intervención.
- Cirugía laparoscópica asistida por robot. Este procedimiento, similar a la cirugía abierta, implica la reparación de la válvula entre el uréter y la vejiga, pero se realiza con incisiones pequeñas. Las ventajas incluyen incisiones más pequeñas y posiblemente menos espasmos vasicales que la cirugía abierta. Pero los hallazgos preliminares sugieren que la cirugía laparoscópica asistida por robot puede no tener un porcentaje de éxito tan alto como la cirugía abierta. El procedimiento también se asoció a un tiempo de operación más largo, pero un internamiento en el hospital más corto.
- Cirugía endoscópica. En este procedimiento, el médico inserta un tubo con luz (cistoscopio) a través de la uretra para ver el interior de la vejiga de tu hijo y luego inyecta una sustancia de volumen alrededor de la abertura del uréter afectado para tratar de fortalecer la capacidad de la válvula para cerrarse correctamente.
- En comparación con la cirugía abierta, este método es mínimamente invasivo y presenta menos riesgos, aunque puede no ser tan eficaz. Este procedimiento también requiere anestesia general, pero, generalmente, puede realizarse como cirugía ambulatoria.
El tratamiento del reflujo vesicoureteral en Mayo Clinic es único en cuanto a su enfoque individualizado de atención médica. No todos los casos de reflujo son iguales. Los urólogos pediátricos de Mayo Clinic hacen hincapié en la realización de una historia clínica y una exploración exhaustivas para brindar la atención adecuada a cada paciente y familia.
Debido a que la disfunción de la vejiga o de los intestinos puede tener un impacto significativo en algunos pacientes que padecen infecciones urinarias recurrentes, con o sin reflujo, Mayo Clinic cuenta con un programa de vanguardia para la rehabilitación y la biorretroalimentación del suelo pélvico a fin de ayudar a curar estas afecciones.
Cuando se requiere una cirugía, tu equipo de atención de Mayo Clinic implementa un plan quirúrgico diseñado para brindar los mejores resultados con el método menos invasivo. Los médicos de Mayo Clinic son innovadores en el procedimiento de cirugía endoscópica con incisiones ocultas, que permite realizar una cirugía con incisiones que no son visibles si el niño usa un traje de baño.